En el equipo de Tourbly, muchos de nosotros somos amantes de los viajes, y naturalmente, siempre estamos en la búsqueda de los lugares más populares cada vez que visitamos un destino nuevo. Con favoritos como Thelonious Jazz Club, Bebop Club y Jazz Voyeur entre otros, prepárate para experimentar los mejores clubs y bares de jazz en Buenos Aires.
6 mejores clubs y bares de jazz en Buenos Aires
1
Thelonious Jazz Club
★★★★☆
4.5
(197)
4.5 de 5 estrellas
Bares de jazz
Thelonious Jazz Club es un renombrado club de jazz en Buenos Aires. A pesar de ser pequeño e íntimo, ofrece un ambiente cálido y acogedor para disfrutar de buena música y una excelente selección de vinos y comida sencilla. La calidad de su programación es excepcional, con músicos de alto nivel que ofrecen shows impresionantes. La acústica del lugar es impecable y permite disfrutar de un sonido perfecto. Es un sitio imprescindible para los amantes del jazz que desean vivir una velada inolvidable en un ambiente íntimo y cercano.
Thelonius Club es un club de jazz con alto prestigio en el mundo jazzistico de Buenos Aires.Es un espacio más bien pequeño, íntimo, muy cálido y bien ambientado, con mesas y una barra que permite degustar buen jazz, algunos vinos y tragos, y alguna que otra comida sencilla.La velada que experimenté fue excelente, con amigos que no querían irse, y con el quinteto (un gran Marano Loiácono en la trompeta y excelentes músicos) que brindó un gran show, de calidad, con un sonido impecable de la banda y la acústica del lugar. Hay una carta de vinos buena, tragos, cerveza para acompañar el perfume que llega a los oídos. También sirven empanadas y pizzas pero ... quién va a Thelonius a comer???Lugar imprescindible para los amantes del jazz!
Un lugar clàsico del buen jazz en vivo que Buenos Aires regala. Ahora en otra locación. Muy disfrutable el homenaje a Django Reinhardt, en el marco del XX festival de jazz, que pude disfrutar el viernes 13. Mucha onda, swing y calidad. Solo resta agradecer por haber disfrutado de una experiencia superior. No deberìa puedo destacar a nadie, porque sería injusto, pero vayan solo dos perlas; el danès/ecuatoriano y el violinista., dos capos. Pudimos disfrutar de un jazz distinto sin vientos ni batería a pura guitarra y cìa. Sublime.
Llegamos y quedamos boca abierta con su decoración, tiene área de fumadores en el patio, buenos tragos y el show de Jazz de primer nivel, esa noche toco NDEZ trío y nos voló la cabeza .!!!! Volvería sin dudas .!!
Excelente lugar para disfrutar de buena música! Muy bien ambientado y buena acústica! Concurrencia relajada y tranquila para escuchar jazz!
El lugar es muy agradable pero hay que reservar con tiempo, la decoración es interesante pero con poca luz no se aprecia.Hay generalmente dos funciones, una alrededor de las 21 y otra 23:30.El cuarteto que actuó estaba compuesto por excelentes músicos que tocaron temas propios de buena calidad.
Thelonious es un club de Jazz muy agradable, en donde se crea un clima íntimo y cercano entre el público y los artistas. La cena fue simple y sabrosa.Decorado con un muy buen gusto,lo recordás y te dan ganas de volver
Buena banda, buen ambiente, excelente la recepcionista, pero las mosas no son amables y la pizza estaba quemada no se podía ni cortar, una lástima.Seria bueno que una vez finalizado el show se pueda quedar uno a escuchar música pero enseguida te hacen retirar, uno pago $400 la entrada + cena gastamos mas de $1000 por persona, pero enseguida nos echaron. Por esos dos motivos doy 3 estrellas.Saludos
Para pasar un rato escuchando buena música, lindo ambiente, buena atención, me encantó la decoración del lugar.
Estuve ayer a la noche escuchando a Iaes, el show muy bueno, como siempre lo son allí. La comida siempre tarda en llegar, si se olvidaron algún utensilio o condimento mucho más. Me trajeron un vino de la etiqueta que pedí pero de mayor nivel. Nunca me mostraron la etiqueta para que yo chequee si era la que yo quería y con el salón en penumbra nunca me dí cuenta. Después de comer pedí un cortado y estaba quemado y recalentado. Pedí que me lo reemplacen y nunca me trajeron uno bueno. Lamentable. Deben mejorar el servicio, porque es una pena que el mismo diste tanto de la calidad de los shows.Califico como “bueno” porque “malo” sería demasiado.
Estuve ayer por la noche escuchando a Iaes. El show muy bueno, como siempre. La atención del restó/bar siempre me deja una sensación de “poco”: la comida tarda en llegar, si las mozas se olvidaron de traerte algo tardan mucho más en traértelo. Ayer me trajeron un malbec La Celia “superior” ( el de mayor precio entre dos malbecs de la misma marca), nunca me mostraron la etiqueta para chequear si respondía mi pedido. Recién me enteré que era el más caro cuando trajeron la factura. Pedí un cortado y estaba quemado y sin espuma ( para mí estaba recalentado por el aroma que emanaba). Pedí me lo cambiaran, tuve que insistir...y NUNCA me lo trajeron. Me acerqué al mostrador con la factura y conté lo que había pasado. La moza le dijo a la chica de la barra: nunca preparaste el café que te pedí como diez veces!. Obvio que dije que ya no lo quería. Un papelón. Por favor mejoren el servicio, ya que son uno de los mejore lugares de Buenos Aires para escuchar jazz.
Bebop Club, en Buenos Aires, es un famoso y acogedor lugar que ofrece espectáculos musicales de calidad. Los usuarios destacan la atención del personal, la programación musical y la variedad de bebidas. Aunque algunos mencionaron precios elevados y la disposición de las mesas algo apretada, consideran que vale la pena visitar este lugar. Si buscas una experiencia nocturna con música excelente en Buenos Aires, Bebop Club es definitivamente una excelente opción.
Fuimos a ver a Annette canta Bossa nova, es la primera vez que vamos y nos encanto !!! Ella divina hace el espectáculo muy ameno y canta hermoso ! Nos gustaron todas las canciones y los músicos que están con ella, por otro lado, el lugar súper agradable, la atención y lo que comimos estuvo muy bien, destacó el Show, seguro volvemos.
Comienzo por decir que al llegar se debe esperar para entrar, haciendo fila en la vereda. El salón está bien, es correcto, aunque las mesas demasiado juntas. Fui con mi esposa, habiendo sacado entradas por mesa para dos, nos asignaron una muy pequeña, en la que se reservaron la posibilidad de agregar a otras dos personas. Ya servir la comida para dos, más las bebidas, resulta muy apretado, imagínense para cuatro personas. Por suerte sólo se agregó una persona que no pidió comida, sino sólo un trago. Jamás volvería por la comida en sí, que es sólo aceptable. Sí, en cambio, destaco el show de Julia Moscardini quinteto. Como crítica al show, diría que la presentación, se hace como muy rápido, apurando todo: show, comida y bebida, para rotar la sala para otro show. Los precios no son económicos. Es más, diría que un poco altos para la calidad de comida, disposición de mesas, y atención brindada. Personalmente, prefiero pagar eso, o incluso más caro, pero tener mejor calidad en los rubros antes indicados.
En esta ocasión fuimos a Palermo en la calle Uriarte 1658. Sin dudas mejoraron el ambiente y la acústica.No tocó sentarnos en una mesa (Que habíamos reservado mirando el mapa de la página) y quedamos tapados por el piano de cola que había en el escenario. Igualmente no fue motivo de queja, ya que el sonido fue muy bueno y posiblemente la falla fue nuestra en no elegir un mejor lugar.En cuanto a la carta, la verdad que los platos eran buenos, de poco contenido, pero excesivamente caros!!!. Todo bien que estemos en Palermo, pero creo que se puede corregir ese tema sin dudas.Te cobran un mínimo por persona de $700, así que si leiste lo que puse anteriormente, cualquier cosa que veas de la carta te van a consumir eso y más!
Como vecino del barrio tengo una opinión ambivalente: por un lado,me apena que haya cerrado un lugar que tenia a media cuadra de mi casa , y por el otro siento cierta sensación de justicia poética porque haya cerrado un lugar que ninguneaba al barrio que le daba de comer, toda vez que se autoproclamaban ubicados en San Telmo cuando ese barrio es Monserrat, ello empañaba lo bueno que ofrecía. Como dice el viejo dicho "la mentira tiene patas cortas "
Fuimos a ver a Pablo Estigarribia el inefable pianista y nos sorprendio el lugar por su acabada decoracion acustica ..aspectos tecnicos inmejorables de sonudo y decoracion mas un servicio amable y eficiente en cuanto a gastronomia ..reservas y obtencion de entrada...todo lo hacen facil....Un lugar imperdible por su programacion en la noche de Buenos Aires...Virgina atenta amable y eficiente...seremos hablituales..Felicitaciones
Excelente ambiente, buen servicio de mesa y muy buena programación musical. La cerveza la sirven bien helada, pero la carta es algo cara y las mesas están un poco pegadas entre sí.
No creo que existan café concert que emulen ese ambiente tan 'Round midnight como éste en Buenos Aires, es realmente único. Y ofrecen semana tras semana una gran variedad de espectáculos.Por otra parte, al haber llegado temprano decidimos cenar en Aldo's restaurant que tiene una amplísima carta de vinos y muy buenas opciones para cenar acompañado de una excelente atención. Claro, no destaca lo económico.
Siempre que puedo me voy al BeBop a disfrutar de un show. Es el ambiente de NYC en San Telmo. Es un lugar amigable para disfrutar en pareja o con amigos. Todos los tragos y bebidas que gustes y para comer un menú aceptable. La atención siempre buena. Yo elijo los palcos, pero en cualquier lugar vas a estar cómodo. A la vuelta tenes estacionamiento. Lo recomiendo.
Jazz Voyeur es un lugar destacado en Buenos Aires para los amantes del jazz. Ubicado en un hermoso sótano, ofrece un ambiente cálido y acogedor. La música en vivo es el plato fuerte, con espectáculos de alta calidad que duran aproximadamente una hora. Los usuarios elogian la atención recibida y la variedad en el menú. Además, se destaca la experiencia culinaria aceptable, aunque algunos mencionan problemas puntuales con la comida. Jazz Voyeur es una opción íntima y vibrante para disfrutar de música en vivo y una experiencia gastronómica satisfactoria. Se recomienda hacer reservas con anticipación.
lugar muy agradable, el conjunto que tocaba estuvo bastante bien, con un clarinetista invitado muy bueno.la cena, ahi viene el desastre!!de entrada pedimos una porcion de rabas, horribles!! parecian bandistas elasticas, duras, imposible de comer, salsas como si estuvieramos comiendo una Burger.segundo plato: pedimos un pollo con un nombre indu, con acompñamiento de arroz basmati. la salsa sin ningun gusto y el arroz pasadisimo, HAY QUE SER MAL COCINERO PARA QUE EL ARROZ BASMATI SALGA PEGOTEADO.comentario: vayan al lugar, tienen buenos espectaculos, tomen unos tragos o un vino, y cuando termina el espectaculo vayan a cenar a otro lugar.
Mi papá cumplió 90 años, y junto a su pareja presenciaron el show de Jazz del viernes 21 de abril. Pasaron una hermosa noche!! ... noche increíble!!.. por supuesto disfrutaron mucho del show, les encantó la música y comieron excelente!! Por sobre todo, quiero agradecer a Charlie Rojas, el encargado de Jazz Voyeur por su enorme amabilidad de ubicarlos en una mesa que yo me había olvidado de reservar!! Además, promovió que la casa invitara sus cubiertos como atención por su cumpleaños núm 90!! Y no fue solo esa la amabilidad de la noche sino que un espectador desconocido del cual no supimos su nombre que adujo vivir en México, también los invitó con las entradas para el show musical!! Fue una noche de sorpresas, de tremenda amabilidad y generosidad para destacar y agradecerles a todos ellos!! Gracias Jazz Voyeur por esa noche!!
Fuimos mi esposa y yo el viernes 25 de marzo. Ha sido una muy grata experiencia. Excelente todo. Empezando desde la llegada al lugar, un muy lindo hotel en una de las mejores zonas de Buenos Aires. Muy lindo el salón, y también la atención del personal. Precios muy razonables, acordes con la calidad ofrecida. Mi mujer pidió una ensalada de langostinos con vegetales y frutos cítricos que estaba riquísima. Yo pedí una tabla de quesos y fiambres que es para compartir, y también estaba bien, aunque venía con aceitunas descarozadas, que a mí no me gustan porque pierden su jugo (un detalle más que menor). Ahora sí, voy a lo más importante. El show que presenciamos ha sido maravilloso. Para aplaudir de pie a cuatro grandes músicos. Montauti en contrabajo, Brandan en batería, y dos monstruos como Carlos Lastra en saxo, y el mejor pianista argentino de este género musical como el maestro Ernesto Jodos. Felicitaciones por la fabulosa performance, y gracias a los cuatro por el placer de escuchar su música. Nos estaremos viendo en otras presentaciones.
El lugar es fantástico. Un sótano con verdadero espíritu musical. No tuvimos una buena experiencia con la comida. Pero fue un detalle menor. Volvería.
Fuimos al espectaculo de Maria Volonte. La comida maso. Muy poca variacion de platos y faltantes. El espectaculo no es malo, pero fuimos a escuchar jazz. Nada de jazz. Las letras bien, ahi.
El lugar está muy bien ambientado, cálido y cómodo.La atención es buena y las opciones de menú son adecuadas.Escuchamos a Juan Canosa Sexteto. Muy buena banda! Recomendable!
el lugar es chiquito, pero acogedor, hay que reservar antes, podes elegir un menú fijo o la carta. Quizás separaría un poco mas las mesas. Los show son de muy buena calidad, duran una hora aproximadamente, arrancan tipo 21.30 hs. Recomiendo para una noche de invierno y romantica!
Vimos un buen show de musica y la comida es aceptable, a pesar de algunas criticas que se han hecho, precios adecuados.
Swing City es un lugar destacado en Buenos Aires para disfrutar de música en vivo, especialmente jazz y swing. Está situado en Villa Crespo y te transportará a la época dorada del jazz con su meticulosa decoración de los años 30. Además de disfrutar de la música, se puede bailar y aprender a bailar estos ritmos. La atención y la comida son excelentes, y los precios son atractivos. Swing City es sin duda una visita obligada si buscas una noche inolvidable en un lugar auténtico y único en Buenos Aires.
Es un buen sitio sin dudas, pero un poco incomodo, en cuanto a la distribucion, es un sitio fino y largo con la banda en vivo al final, con lo que solo algunas mesas pueden estar cerca. De todos modos es un lugar dentro de todo pequeño. Por otro lado (y en parte asociado al espacio disponible) las mesas y sobre todo las sillas deberían ser mejores, mas cómodas, o espaciosas. En ese sentido no estuve cómodo. >El servicio muy bien, pocas opciones gastronomicas pero apropiadas. De todos modos el precio fue muy adecuado. Personalmente pagaria un poco mas para estar en un mejor sitio, pero no esta nada mal. La parte musical estuvo muy bien.
Las mejores bandas de jazz y swing de Buenos Aires están en Swing City.Para bailar, el mejor lugar. La comida, riquísima y el servicio, impecable.Pasamos una noche hermosa, en un hermoso lugar.Súper recomendable!!!!
Hermosa esquina de Villa Crespo para escuchar buena música, conocer bandas de Jazz y por qué no bailar alRitmo del Swing.
Vimos una banda excelente, comimos riquisimo y hasta bailamos un rato! El espacio es hermoso, la propuesta de bandas siempre parece tentadora, con buen sonido y un grupo de personas encantadoras que nos hicieron pasar una noche inolvidable. Gracias y volvemos pronto! Totalmente recomendable!
Una hermosa salida para disfrutar del jazz y lamúsica en vivo! El lugar está muy bien ambientado, la atención es cálida y atenta, y la posibilidad de poder tener shows de la calidad que ofrece Swing City es casi única! Recomiendo muchísimo.
El mejor lugar que tiene la ciudad para bailar swing y escuchar jazz! El bar está buenísimo, las personas que atienden son súper cálidas y amables y tiene opciones muy ricas y accesibles. Se puede ir a tomar algo y escuchar buena música y si tenés ganas, bailar. Además, el lugar está todo ambientado, así que la experiencia de época empieza ni bien entrás! Recomiendo mucho!
El lugar es una joyita ubicada estratégicamente para moverse de forma cómoda y segura por la noche. Todo te invita a pasar y la música y la atención te hacen quedar. Recomiendo las Caipirinhas!
La mejor experiencia para escuchar jazz en vivo en Buenos Aires! El lugar es precioso y la atención es súper cálida!La ubicación es ideal. Para volver y recomendar!
Increíble lugar pasar una noche tomando algo con la mejor música de jazz y swing, y también aprender a bailar. Excelente atención!!!Recomiendo mucho visitarlos!
Entrar ya es mágico, toda la decoración hace recordar a la época dorada del Jazz. La gente es muy amable, la comida y la bebida están muy bien. Les dejo mis 5 estrellas, espero poder volver pronto
La Milonga Cañón es un centro cultural en Buenos Aires que ofrece una auténtica experiencia de la vida nocturna de la ciudad. Con clases de tango para todos los niveles y música en vivo, es el lugar perfecto para sumergirse en el arte del tango. Además de las clases, se puede disfrutar de deliciosa comida y bebida típica. Los visitantes elogian la belleza del lugar y la calidad de su servicio. También hay espectáculos de tango contemporáneo los martes por la noche. La Milonga Cañón ofrece una noche inolvidable de música, baile y buena compañía en un ambiente mágico.
Un lugar muy recomendable para conocer la noche porteña en Buenos Aires, buena ubicación, ambiente amable, las clases de tango son para todos los niveles, no hace falta tener conocimientos previos o ir acompañado con pareja de baile. En la clase de tango es posible aprender los dos roles (lider-seguidor) . El espacio cuenta con una amplia variedad de opciones para beber y comer. La milonga es musicalizada por tangos de artistas en actividad, una buena oportunidad para conocer la nueva música de Buenos Aires.. Es un espacio ameno para conocer gente local e internacional. La música en vivo fue de lo mejor de la noche donde se presentó una orquesta de tango. Además de bailar mi primer tango con una orquesta en vivo. Muy recomendable y volvería otra vez. Es una experiencia real, no artificial para vivir de cerca el espíritu de una ciudad que vibra con el Tango del presente.
Todo fue hermoso, la clase antes del show, la musica, el lugar, la atención Inclusive las empanadas típicas
Fui a tomar una clase porque quería empezar a bailar tango. Arrancaba a las nueve, cuando llegué el lugar era un primer piso que se llega por una escalera llena de murales. Arriba, una casa antigua convertida en Centro Cultural. La clase estuvo genial. Después me quedé cuando empezó la milonga y vi cómo la gente bailaba. Pasadas las once tocó un grupo de tango muy moderno. Muy bueno. Me fui recién pasada la medianoche. Excelente plan para cortar la semana un día martes
Realmente fue una experiencia hermosa. Llegué con un par de amigos a las 21. Es una casa antigua en un primer piso remodelada como centro cultural. Cuando llegamos había una clase de tango y la tomamos. Algunos de mis amigos ya bailaban y para otros era nuestra primera vez, pero todos tomamos la clase y nos divertimos mucho.Después cenamos una hamburguesa y a eso de las once de la noche tocó un grupo de tango en vivo. Me sorprendió que tocaban todos tangos nuevos, y que la música de la milonga también lo eran
Nuevos e interesantes conjuntos de tango: ¡vale la pena visitarlos también solo para escuchar!Lugar informal y relajado de milonga.Para bailar el piso podría ser mejor.
Si ha tenido suficiente de milongas tradicionales y formales, o si solo quiere una introducción amigable al tango contemporáneo en Buenos Aires, ¡venga a Milonga Del Pez Ca n! El DJ toca música bailable con un punto de vista diferente, y Ca n, la "banda de la casa", es uno de los conjuntos de tango más interesantes de nuestro tiempo. La cocina sirve excelentes pasteles llenos de exquisiteces de la temporada, y también hay una clase de tango antes de la milonga.
Muy buena milonga en un lugar acogedor con ambiente agradable; puedes tomar una clase de tango, escuchar música en vivo (¡muy buena banda!) y bailar, una excelente oportunidad para sentir el espíritu del tango moderno en el corazón de Buenos Aires
Del Barco Centenera 1099 Del Barco Centenera, esquina Estrada (Parque Chacabuco)
La Hormiga de Oro es un acogedor bar en el barrio de Almagro, Buenos Aires, conocido por su música en vivo de alta calidad y una variedad de espectáculos, incluyendo tango, folclore y stand up comedy. El lugar cuenta con precios accesibles, excelente atención al cliente y una amplia selección de tragos de autor y comidas. Las reseñas destacan la hospitalidad de los dueños, la calidad de la música y los precios económicos. Es un lugar ideal para disfrutar de buena música, bebidas y ambiente a precios asequibles.
Simple, buena atención, buenos precios y se puede uno encontrar con un buen espectáculo musical bueno, previa vista en la página sabremos cuál es el proyecto del día
En el barrio de almagro, un lugar para escuchar musica, shows de tango, folclore, stand up, y mucho mas. Tragos de autor, comidita rica, y una atención copada, y sin tener q hipotecar la casa. Muy recomendable. Me encanta.
Ya fui un par de veces, los dueños mismos te atienden y se preocupan de que estés bien todo el tiempo. Ya que pase eso en un bar porteño te llama la atención. Después lo sigue la excelente música que se escucha, y lo termina de rematar los excelentes precios de la barra. El ambiente es bueno para ir con amigos o en una cita. Tienen casi todos los tragos y la decoración también es impecable.Lo único que le falta es un happy hour, que espero que próximamente lo hagan así puedo ir más seguido.
Gran bar para tomarte un trago (recomiendo mucho el negroni) y escuchar buena música. Suelen tocar bandas, o si no suena música en vinilos!Los precios son realmente muy baratos, el lugar es grande, los dueños muy buena onda.
Fui ya dos veces, es un muy buen bar para ir a escuchar buenas bandas o ver stand up y mientras tomar unos buenos tragos. Los tragos muy baratos y muy buenos. Lo recomiendo.
Fui allí un sábado, me encantó, y sin duda lo recomendaría y volvería otra vez.Dirigido por los propietarios, que son muy amables y acogedores, puede ir con amigos o con una fecha, escuchar la música en vivo y disfrutar realmente buenos y baratos cócteles.Si tengo que decir algo que cambiaría es la pizza, la pizza I orden salió con suaves masa, tan suave que era incluso difícil comer
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