El Matadero (Carhué)

El Matadero, ubicado en la provincia de Buenos Aires, es un paseo interesante y una parada obligatoria de no más de 20 minutos en el camino hacia el paseo Villa Epecuén. Además de su valor estético, este lugar es ideal para capturar fotografías interesantes que dejarán recuerdos inolvidables. Aunque solo se puede ver desde el exterior y cuenta con solo un par de carteles explicativos, el edificio muestra parte de la historia de la región, junto con la visita a la Villa abandonada y el Museo. Esta construcción tiene una arquitectura particular que evoca sentimientos de tristeza debido a su pasado como fuente de trabajo para la población y la devastación que sufrió tras la inundación.

Visitar El Matadero en la provincia de Buenos Aires es adentrarse en una parte importante y triste de la historia local. Este icónico edificio forma parte del recorrido hacia los vestigios de Villa Epecuén y comparte semejanzas arquitectónicas con la municipalidad de Carhué, ya que fue diseñado por el mismo arquitecto. Aunque solo se puede apreciar su estado externo, la ubicación y el estado de este monumento lo hacen una visita que vale la pena. Si tienes interés en la obra de Salamone, también es posible visitar la municipalidad de Carhué, donde podrás ingresar en días hábiles y apreciar su mobiliario e iluminación diseñada por el autor.

El Matadero es una obra magnífica, como todas las creaciones del reconocido arquitecto Francisco Salamone. A pesar de su estado de ruina y deterioro causado por la inundación, sigue impactando a quienes lo visitan gracias a la imponencia de su estructura. La presencia de árboles petrificados y raíces que emergen del suelo en los alrededores del edificio hacen que la visita sea aún más asombrosa y memorable. Situado entre Carhué y Villa Epecuén, este lugar debe ser explorado durante el día para poder apreciar todos los detalles de su arquitectura y la belleza natural que lo rodea.

Importante: Antes de planificar tu visita, asegúrate de verificar el estado actual de El Matadero y sus horarios de apertura al público, ya que puede haber ciertas restricciones o limitaciones debido a la naturaleza en ruinas del lugar y a posibles señales de vandalismo y destrucción en su interior. Disfruta de esta experiencia única y aprovecha el bien estado del camino para acceder a esta joya arquitectónica y sumergirte en parte de la historia de la Provincia de Buenos Aires.