Cabo Blanco (Puerto Deseado)

Ubicado a 90 kilómetros de Puerto Deseado, Cabo Blanco es un destino imperdible para aquellos que deseen disfrutar de un paisaje casi virgen y de la flora y fauna típica de la Patagonia. Acceder a este paraje es posible a través de un camino de ripio que, en general, está en buen estado, aunque algunos tramos cercanos al cabo pueden presentar algunas irregularidades. A lo largo del trayecto, los visitantes pueden deleitarse con la vista de la impresionante fauna patagónica.

Cabo Blanco se destaca por su singular paisaje, ya que es un promontorio que divide la costa en playas muy diferentes entre sí. Aquí es posible encontrar sitios ideales para hacer un picnic y disfrutar de un tranquilo momento al aire libre bajo un entorno casi virgen. Sin embargo, hay que destacar que, aunque está prohibido subir al cabo, es allí donde se encuentran las mejores vistas y se puede admirar el espectáculo de la punta rocosa fusionándose con el inmenso océano. Sería recomendable que las autoridades garanticen un acceso seguro que resguarde el faro y la casa de apoyo, para que la experiencia turística sea completa y enriquecedora.

Debido a la belleza natural y la abundancia de fauna marina, aves y guanacos, Cabo Blanco es un lugar alucinante que vale la pena visitar. Aunque el camino de ripio puede resultar largo y en parte accidentado, llegar hasta este destino es una experiencia en sí misma, ya que la inmensidad del paisaje y la tranquilidad que se respira hacen pensar que cada rincón de Argentina es asombroso. Recuerda que no hay servicios cerca, por lo que es importante llevar todo lo necesario para disfrutar al máximo de esta joya escondida. Desde la cima del faro, se puede apreciar una vista increíble que brinda una perspectiva única de la intensidad de la naturaleza en este lugar.